jueves, 30 de agosto de 2018

VUELVO...

Estoy mejor. La conformidad ante lo que no tiene remedio, es una ayuda más que eficaz para seguir subiendo escalones aunque formen parte de una escalera imaginaria cada vez más angosta que la niebla difumina, pero hay que subir y el esfuerzo es compañero indispensable para llegar. Yo me esfuerzo y noto a mi lado el soplo del aliento de quien tanto amé. Me escucha y me ayuda a seguir los peldaños y estoy convencida de que el final de la escalera, la meta,  estará llena de luz y gozaré con sus destellos. Y noto que me empuja y cómo desea que llegue.

1 comentario:

Tesa dijo...

No tengas dudas, él está ahí y lo que más desea es que vuelvas a ser tú. Con toda tu energía y chispa.

Un abrazo,

Perlas del Segura